Durante el invierno los hemos tenido escondidos pero con la llegada del buen tiempo los pies piden a gritos ir al aire y tienen que estar perfectos. La piel de los pies tiene tendencia a deshidratarse y endurecerse, especialmente la zona de los talones, y debemos tener ciertos cuidados para que esto no suceda. No os preocupéis, la solución es muy fácil y podremos presumir de pies perfectos este verano.
¡Di adiós a los talones secos y agrietados! La piel de las plantas de los pies va engrosando con el paso de los años por dos motivos: el primero es que es la parte de nuestro cuerpo que soporta más peso y el segundo, que la llevamos protegida por el calzado la mayor parte del tiempo.
Con la llegada del buen tiempo empezamos a utilizar zapatos abiertos y esta capa tan gruesa de células muertas por el efecto del calzado cerrado se reseca y deshidrata rápidamente, lo que provoca un aspecto bastante feo, especialmente en los talones. Vamos a pasar mucho tiempo descalzas o semidescalzas, por lo que debemos dedicar un poco de tiempo a cuidar nuestros pies. Sigue estos consejos y podrás presumir de pies perfectos.
- Comienza con una sesión de pedicura. Cuando liberamos nuestros pies, tras una larga época de frío y calcetines, éstos pueden tener un aspecto algo descuidado. Por ello, lo primero que debemos hacer es ponerlos a punto sumergiéndolos en agua con sal durante 20 minutos y dando un repaso a las durezas con una lima especial o piedra pómez. Por supuesto, una vez acabado el baño, es indispensable secarse muy bien los pies, sobre todo entre los dedos. La humedad favorece la aparición y proliferación de hongos y bacterias.
- Hidrata los pies. Te recomendamos el Bálsamo Reparador de Pies VID DIVINE de ESDOR, que nutre y refresca a la vez que protege y calma los pies. Aprovecha para darte un placentero masaje, comienza frotándote el empeine con los pulgares. Continúa masajeándote con movimientos ascendentes por la planta del pie y cuando llegues al talón pellízcatelo suavemente para mejorar el flujo sanguíneo. Presta atención a los dedos y dales ligeros tironcitos a cada uno de ellos.
- Si necesitas una dosis extra de hidratación, aplícala antes de irte a dormir y ponte unos calcetines. ¡Te despertarás con los pies perfectos e increíblemente suaves!
- Ejercita los pies y reactiva la circulación. Ejercitarlos también es importante, y por eso es recomendable siempre que podamos caminar descalzos y hacer pequeños estiramientos y ejercicios, para ejercitar músculos que han quedado más adormecidos a causa del calzado.
- Cuida tus uñas. ¡Es el momento de lucir esmalte de uñas! El verano nos permite ser mucho más atrevidas. Un buen esmalte hará que la belleza de tus pies resalte aún más, pero recuerda que deben estar bien pintadas y cuidadas, ya que un esmalte desconchado o unas uñas pintadas con mal pulso provocarán la sensación contraria.
¡Así que ya lo sabes! No descuides tus pies, dedícales un poquito de tiempo al día y notarás la diferencia, ellos hacen mucho por ti, es hora de devolverles el favor. 😉
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