Limpieza facial, resuelve tus dudas!

¿Campo o ciudad? ¿Vino o cerveza? ¿Agua micelar, leche limpiadora o gel limpiador?

Las dos primeras cuestiones responden más a factores personales, pero si todavía te sigues preguntando cuál es la mejor opción para la limpieza de tu piel, este post te dará la clave!

Las necesidades de limpieza de la piel varían dependiendo del tipo de la misma, por ejemplo, si limpiamos una piel sensible con jabón puede irritarse, o si limpiamos una piel mixta con aceite pueden aparecer granitos, así que afortunadamente hoy en día disponemos de soluciones para todo tipo de piel!

Antes de empezar a hablar de limpiadores, debemos saber que lo ideal es limpiar la piel del rostro dos veces al día (mañana y noche), tanto para eliminar impurezas y maquillaje como para retirar el exceso de grasa.

Además, si la piel está limpia responderá mucho mejor a cualquier producto que apliques, ya sea de tratamiento o no.

Agua micelar:

La popularidad de este producto se encuentra en las micelas, unas partículas que atraen la grasa y suciedad para limpiar la piel. Y si además tenemos en cuenta que es un producto muy fácil y rápido de utilizar, no hay excusas!

Para que las micelas actúen correctamente, hay que aplicar el agua micelar con un algodón o disco desmaquillante, dando ligeros toques en la piel y pasando el algodón suavemente.

En el caso de tener la piel seca, lo más recomendable es usar un agua micelar especial para este tipo de piel o utilizar gel o leche limpiadora.

Leche limpiadora:

Es perfecta para pieles sensibles, secas o deshidratadas, y además limpia en profundidad la piel si se sabe utilizar. Se desaconseja su utilización si la piel es grasa.

Para limpiar el maquillaje, lo más adecuado es empezar retirando el maquillaje de los ojos con un producto específico para ello, y después aplicar la leche limpiadora con discos de algodón y movimientos circulares.

Se pueden hacer dos limpiezas; una primera para quitar el maquillaje y otra para retirar los posibles restos y terminar de limpiar la piel.

Después de esta limpieza, debemos recurrir a un tónico facial, que nos ayudará a equilibrar el pH de la piel y a mantener su equilibrio. Se aplica también con discos desmaquillantes o pulverizado directamente sobre la piel.

Gel limpiador:

Además de estos productos también existen los geles limpiadores, indicados para pieles mixtas o grasas y con una textura muy jugosa.

Hay muchos geles que no contienen ni alcohol ni jabón, por lo que son más respetuosos con la piel. Su uso es tan sencillo como aplicarlo y realizar movimientos circulares con las yemas de los dedos para retirarlo después con agua.

Dicho todo esto, espero haber resuelto vuestras dudas! Acordaos de este post cuando os de pereza limpiaros la cara antes de ir a la cama…. La base de una buena salud facial depende mucho de los hábitos que se tengan!